¿Cómo dar el salto al ejercicio profesional?

Hoy compartimos una conversación inspiradora con Arancha Pérez, estudiante de Derecho en la Universidad Rey Juan Carlos y miembro activo de la asociación Iurist . En una charla amena pero cargada de fondo con nuestro socio-director Eduardo Simó, abordamos inquietudes comunes entre quienes están a punto de cruzar la línea que separa la universidad del mundo profesional.

¿Dónde abrir tu despacho: ciudad grande o localidad natal?

Eduardo comparte su experiencia desde ambos escenarios. Las grandes ciudades como Madrid ofrecen más volumen de clientes, networking y especialización. Pero también suponen mayor competencia y costes más elevados. Por el contrario, abrir despacho en tu localidad de origen puede facilitar una cartera inicial de clientes basada en la confianza y la cercanía, además de un menor coste operativo.

¿La clave? Analiza tu red de contactos, tus recursos iniciales y tu capacidad para posicionarte. No hay fórmulas mágicas, pero sí decisiones conscientes.

¿Especializarse o ser generalista?

Uno de los grandes dilemas. En un contexto donde la especialización parece imperar, Eduardo invita a un enfoque más flexible:

La especialización es un camino, no un punto de partida obligatorio. Al comienzo, es útil conocer distintas áreas, porque te permite detectar tus fortalezas, tus preferencias… y dónde puedes aportar más valor.

Desde su experiencia en Derecho Penal, destaca cómo una base sólida general puede ser clave para quienes luego deciden profundizar en una rama concreta del Derecho.

¿Y el máster? ¿Vale la pena?

Aquí se rompieron mitos. Arancha planteó una de las preguntas más frecuentes: ¿Realmente merece la pena invertir en un máster después del grado?

La respuesta de Eduardo fue clara: depende del objetivo. Si buscas ejercer como abogado, el Máster de Acceso es imprescindible. Pero si tu interés es profundizar en un área específica, conviene investigar muy bien el contenido, el profesorado y el enfoque práctico del programa.

Consejos para quienes están empezando

La conversación concluyó con algunos consejos prácticos para estudiantes y recién graduados:

• Busca referentes, no solo en libros, también en personas. Habla con profesionales, asiste a charlas, participa en asociaciones.
• No tengas miedo a equivocarte. El error también forma parte del aprendizaje.
• Empieza a construir tu marca personal desde ya. El prestigio se forja con tiempo, constancia y coherencia.
• Y sobre todo: cree en ti. El Derecho necesita más voces con pasión, ética y compromiso.

 Esta charla es parte de nuestra iniciativa para acercar el ejercicio real de la abogacía a las nuevas generaciones. En Simó Abogados creemos que compartir experiencias es la mejor forma de construir comunidad jurídica.

¿Te gustaría participar en un encuentro como este? Escríbenos, ¡nos encantará seguir la conversación!